* Ante disminución del presupuesto en salud. Para 2017 el presupuesto público destinado a la salud se reduce en términos término reales en 4, 610 millones de pesos. Es oportuno y necesario considerar medidas que reduzcan el gasto público y aumenten la recaudación sin afectar a los sectores vulnerables, como la indexación del impuesto al tabaco.
Redacción RD:
CDMX octubre 2016.-
Organizaciones de la sociedad civil acudieron a la Audiencia Pública convocada
por la Comisión de Hacienda y Crédito Público de la Cámara de Diputados para exponer opciones claras de actualización al impuesto del tabaco
(Indexación), que respetan los compromisos gubernamentales de NO elevar los impuestos y que ayudarían a solventar parte
significativa de las reducciones al sector salud con respecto al actual paquete
económico.
En un contexto de crisis fiscal, es oportuno y necesario
considerar medidas que reduzcan el gasto público y aumenten la recaudación sin
afectar a los sectores vulnerables, como la indexación del impuesto al tabaco.
En dicha audiencia Erick Antonio Ochoa, de la Fundación
InterAmericana del Corazón México (FIC México) expuso una alternativa
económica ante la reciente disminución del presupuesto en salud considerando la actualización de
impuestos a los productos de tabaco. “Para 2017 el presupuesto público
destinado a la salud se reduce en términos reales en 4 mil 610 millones de
pesos.
Las instituciones más afectadas son el Instituto Nacional de
Cancerología (-31%), el programa de Prevención y Control de sobrepeso, Obesidad
y Diabetes (-25.6%) y el Seguro Popular (-11.8%)” señaló.
Recordó que en 2010 el Congreso aprobó incrementar el
componente fijo del IEPS a productos del tabaco en 35 centavos por unidad
con el fin de disuadir y evitar, por la vía de un mayor precio, el consumo del
producto, sin embargo, no dispuso la actualización de impuestos conforme a la
inflación evitando así que se mantenga el valor del impuesto en el tiempo.
Esto ha ocasionado la disminución del potencial de
recaudación del impuesto en los últimos 5 años. La propuesta de FIC cumple con el Acuerdo de Certidumbre
Tributaria, firmado por el Presidente de la República en febrero de 2014, pues
no crea nuevos impuestos ni aumenta en términos reales las tasas de impuestos
existentes.
Erick Antonio
propuso que “Considerando la inflación acumulada entre 2011 y 2016 (cerca de
20%), el componente específico del impuesto especial tendría que ser de 42
centavos por cigarro, y no 35 centavos como está actualmente. Si además los
productores ajustan el precio al detallista de acuerdo con la inflación
esperada para 2016, el ajuste del componente específico impactaría el precio
real entre 2 y 3 por ciento.
Tomando en cuenta el efecto del precio real sobre el consumo
la actualización permitiría recaudar cerca de 3,000 millones de pesos
adicionales en 2017, lo cual representa un incremento real de 6 % sobre la
recaudación estimada para este año”.
Señaló que la industria tabacalera se apone al aumento del
IEPS, argumentado que precios más altos ocasionen el comercio ilegal, a pesar
de que las tabacaleras sí han aumentado los precios de sus productos. Varios
estudios han demostrado que los impuestos no provocan comercio ilegal. Con
datos del Centro de Investigación para el Desarrollo, A.C., sólo 6% de los
entrevistados había consumido cigarros piratas en el último año.
“En un contexto de crisis fiscal como el que enfrentamos, es
oportuno y necesario considerar medidas que reduzcan el gasto público y que a
su vez aumenten la recaudación sin afectar a los sectores económicamente
vulnerables. Al indexar el IEPS a tabaco se cumple con este doble propósito,
además que se cumple con el Acuerdo de Certidumbre Tributaria firmado por el Presidente
en febrero del 2014” concluyó Antonio
Ochoa.