* Estuvo a cargo por Margarita Zavala y el Director General del Seguro Social, Daniel Karam Toumeh, señaló que el CASSAAM brindará servicios interdisciplinarios de valoración integral y envejecimiento activo.
(Redacción).- La dignidad de un pueblo se demuestra en el respeto y valoración a sus adultos mayores, afirmó Margarita Zavala, presidenta del DIF nacional, al inaugurar el primer Centro de Atención Social a la Salud de las y los Adultos Mayores (CASSAAM) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Acompañada por el Director General del IMSS, Daniel Karam Toumeh, la licenciada Margarita Zavala señaló que este Centro, además de brindar atención integral al adulto mayor, promoverá la investigación, la docencia y la asistencia social. “Es un Centro, desde el punto de vista de la salud, que no sólo ve por la parte física donde se hace un diagnóstico, sino una integración a la vida social”.
En la ceremonia, a la que asistieron también Francisco Javier Garzón, representante de la Embajada de España, y Valdemar Gutiérrez Fragoso, secretario general del Sindicato Nacional de los Trabajadores del Seguro Social (SNTSS), la Presidenta del DIF Nacional recordó que el 1 de octubre se celebra del Día Internacional del Adulto Mayor y que el CASSAAM es muestra de la importancia que tiene para el gobierno construir una sociedad donde las personas de todas las edades puedan trabajar, colaborar y promover una mejor calidad de vida.
Y es que, agregó, “es indispensable, como país, preservar las tradiciones y cultura que los adultos mayores nos recuerdan quiénes somos y nuestras verdaderas aspiraciones como país”, indicó la Presidenta del DIF Nacional. En su oportunidad, el Director General del IMSS destacó que este modelo de atención, ubicado en la Unidad Morelos del Seguro Social en la ciudad de México, brindará a las mujeres y hombres mayores de 60 años, servicios interdisciplinarios de valoración integral y de envejecimiento activo para mantener, prolongar y recuperar su salud e independencia funcional.
Karam Toumeh indicó que en nuestro país, uno de los grandes aciertos conseguidos mediante el trabajo de las instituciones de salud se refleja en la ampliación de la esperanza de vida; “este paso positivo importante implica el reto de integrar una sociedad que cada día tendrá más personas de edad avanzada”.
Enfatizó que se debe trabajar y aprovechar todas las herramientas de la seguridad social, “afortunadamente en nuestro Seguro Social, que es la institución mexicana que cuenta con la infraestructura más sólida y amplia para la atención de las y los adultos mayores, ponemos nuestro granito de arena con este Centro”.
Sabemos, dijo, que la cultura preventiva es la llave de las sociedades modernas y no podemos darnos el lujo de llegar a ser adultos mayores sin salud. En el IMSS, además de tener una amplia red de atención a la salud, contamos con la capacidad creativa de nuestro personal para desplegar su talento en beneficio de nuestros derechohabientes, señaló el funcionario.
Por su parte, el secretario general del Sindicato, Valdemar Gutiérrez Fragoso, señaló que el Centro permitirá el desarrollo de estudios en el área geriátrica y gerontológica, lo que posibilita tener un mejor panorama en la salud de hombres y mujeres de la tercera edad. “El IMSS y su Sindicato de trabajadores estamos preocupados por hacer que el proceso de envejecimiento de los derechohabientes sea lo más armonioso posible, buscamos así promover la salud con un enfoque integral”, puntualizó.
El Centro de Atención Social a la Salud de las y los Adultos Mayores (CASSAAM) será impulsor de estudios, otorgará servicios interdisciplinarios de valoración integral y de envejecimiento activo, para mantener, prolongar y recuperar la salud e independencia funcional; capacitará y formará profesionales y técnicos en la materia; y desarrollará modelos basados en evidencias científicas, para su implantación en las Unidades Operativas de Prestaciones Sociales Institucionales del país.
El propósito fundamental de esta Unidad es que las personas lleguen a su vejez conservando el mayor tiempo posible su independencia funcional; es decir, que puedan seguir resolviendo por sí solos sus actividades básicas de la vida diaria (levantarse, desplazarse en casa, bañarse, vestirse, arreglarse, comer, ir al baño), así como sus actividades instrumentales de la vida diaria (tomar sus medicamentos, hablar por teléfono, salir, desplazarse en la calle o utilizar el transporte público, hacer sus compras y llevar sus cuentas).