|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Redacción RD.
CDMX 19 febrero 2018.- El sitio inmobiliario Propiedades.com consultó a expertos para analizar grietas y otros daños de un inmueble y saber si son o no de riesgo.
Luego de un temblor, es importante verificar que la construcción se encuentre en buen estado y, si tiene algún daño, asegurarse de que no sea grave.
Si detectas grietas, fracturas, inclinaciones o hundimientos, es importante que lo reportes a la Secretaría de Protección Civil al teléfono 5615 7970.
El sitio inmobiliario Propiedades.com consultó a expertos para analizar grietas y otros daños de un inmueble y saber si son o no de riesgo.
El primer paso es conocer los elementos que componen una construcción y la fecha en la que fue edificada. También hay que revisar los muros y el piso para confirmar si se tienen daños graves o superficiales.
Por ello José Antonio López; vocal de la Mesa Directiva de la Sociedad Mexicana de Ingeniería Sísmica, explicó que si las grietas forman una diagonal con la horizontal del piso, o bien, están paralelas a éste, entonces son altamente peligrosas y la construcción debe abandonarse hasta que sea revisada.
“Si en una losa las grietas van diagonales desde las esquinas hasta el centro, es una falla importante. Si se pueden apreciar grietas en más del 20% de los muros de una construcción, ésta podría correr riesgo y deberá ser revisada”, detalló el experto.
Tras un sismo también se pueden producir hundimientos, desplomes, golpeteo con edificios, desprendimiento de recubrimiento, vibraciones de losas o sistemas de piso y huecos en elementos estructurales, señaló. López.
El directivo dio estos consejos para revisar un inmueble antes de comprarlo:
1. Identificar el modo de construcción; columnas y trabes, o muros de concreto y mampostería. Si se trata de una construcción que combina estos sistemas, su comportamiento puede ser dudoso.
2. Si el vendedor no entrega planos arquitectónicos, estructurales y de instalaciones, es mejor considerarlo de mala calidad.
3. Analizar todas las construcciones aledañas. Si es un edificio con departamentos, revisar todo de manera externa, incluyendo las rampas de escaleras.
4. Es importante golpear con los nudillos sobre muros, columnas, trabes, elementos estructurales e intentar escuchar si están huecos o no. Esto porque a veces es difícil apreciar deficiencias constructivas. De igual manera, verificar que no vibren los sistemas de piso.
Antes de comprar…
Antes de elegir una propiedad, es necesario revisar el historial del inmueble. El ingeniero civil y director responsable de obra, Raúl Aranzabal, consideró que es importante revisar si hay cambios en el uso de suelo, o bien, si en la planta baja hay algún establecimiento comercial. También recomendó tener cuidado con espacios de más de 10 pisos.
“Las fisuras comunes son a 45 grados en los muros de rigidez, aunque se pueden reparar, casi siempre se nota algún aplanado mal puesto, alguna fisura que fue reparada. Son las más peligrosas porque quiere decir que el edificio se movió y tronó hacia algún lado”, advirtió Aranzabal.
Si el edificio tiene estacionamientos subterráneos es positivo, pues eso genera más estabilidad para la construcción, por la tierra que se quita del subsuelo, destacó. Pero algunos de los edificios que cuentan con mezzanine son inseguros, pues carecen de muros de carga suficientes.
El especialista destacó que al revisar la antigüedad de un inmueble se obtiene la referencia del reglamento en el que está basada su construcción.
“La fecha de construcción da un aproximado de la norma de sismo utilizada para su diseño y sabiendo que va evolucionando y siendo más estricta con el pasar de las versiones, una edificación antigua podría no tener la seguridad de resistir un evento sísmico de magnitud moderada a intensa”, advirtió.
Al comprar una casa o departamento se debe evitar una propiedad si presenta hundimientos, grietas en columnas, muros o trabes, y principalmente si las fisuras son diagonales, destacó el integrante de la Sociedad Mexicana de Ingeniería Sísmica. Ante esto, lo mejor es acudir con un ingeniero o arquitecto para que analice el inmueble.