CDMX, Enero.2018. Cada vez es más aparente que la ruta de desarrollo adoptada a nivel internacional no es sostenible. Además de que existe una mayor evidencia de la existencia de un desarrollo que se centra en únicamente un patrón de desarrollo, que ha seguido los Estados Unidos desde su industrialización.

Este está ocasionando una mayor disparidad en los ingresos y la riqueza, como señala el reporte de Oxfam en 2017, que destaca ,únicamente ocho individuos a nivel mundial poseen la riqueza equivalente a la de la mitad de la población del planeta. No existe duda de que el patrón de desarrollo actual ha llevado a mayores ingresos, y a la reducción de la pobreza en algunos lugares del mundo. Sin embargo, se ha llevado a cabo a un alto costo para el medio ambiente, los ecosistemas de la Tierra y sus recursos naturales.

La concentración de dióxido de carbono, que fue de 280 partes por millón (ppm) al inicio de la industrialización, hoy se encuentra en un exceso de 400 ppm,  una tendencia creciente que continúa El resultado del cambio climático se traduce en un aumento en los impactos que amenazan a la vida y a la propiedad, involucrando altos costos económicos, sin considerar un mayor sufrimiento humano.

Como mencionó en 2017 el Profesor Federico Mayor, que fue Director General de la UNESCO, el mundo incurre en un costo de 350,000 millones de dólares en desastres relacionados con el clima. La creciente utilización de plásticos y la disposición de residuos en los océanos están resultando que todas las formas de vida marina presenten señales de plástico y residuos en sus cuerpos. Lo anterior puede llevar a la reducción de las reservas de peces, afectaciones a la salud humana de los productos marinos consumidos, y la posible extinción de especies marinas.

Existe un aumento en la intensidad y frecuencia de eventos extremos, como; ondas de calor, precipitaciones extremas y el aumento en el nivel del mar. Asimismo, existen partes del mundo donde las sequías prolongadas son comunes, resultado en extensos incendios forestales y ondas de calor combinadas con periodos de sequía más largos.

Existen muchos foros que se están enfocando en el crecimiento económico, la globalización de la economía y en mejoras en las condiciones de vida humana. Sin embargo, rara vez abordan algunos de los retos a largo plazo más serios de la sociedad y el planeta de una manera integral.

El Acuerdo de París sobre Cambio Climático provee una oportunidad para enfrentar al cambio climático. Sin embargo, con lo niveles de compromiso actuales hechos por los gobiernos, la temperatura media global se mantendría arriba del límite de 2°C que define la meta de este acuerdo. La mayoría de los foros enfocados a cuestiones del desarrollo a nivel global, todavía se encuentran obsesionados con el crecimiento del PIB, a pesar de que esto pueda llevar a un incremento en las externalidades negativas y a la reducción de los recursos naturales a nivel global.

La reciente cumbre en Davos, que atrajo a los tomadores de decisiones más poderosos y ricos del mundo, desafortunadamente, estuvo dominada por el discurso pronunciado por el presidente Donald Trump. Claramente, se necesitan foros alternativos que no se enfoquen únicamente en el siguiente cuarto de siglo, sino que se enfoquen al siguiente cuarto y más allá.

El Foro Mundial de Desarrollo Sustentable (WSDF, siglas en inglés) se ha establecido precisamente con ese objetivo. Este foro apoyado por 19 líderes distinguidos de todo el mundo, como Patrocinadores de la organización, y representa el primer evento global, que se está llevando a cabo en la CDMX trayendo algunas de las mentes más brillantes y visionarios que discutirán y llegarán a soluciones que necesitan una atención especial y su diseminación en todo el mundo.

La CDMX fue elegida como el lugar para desarrollar el foro anual principal, debido a que México es un país rico en tradiciones, una cultura distintiva, y una sociedad joven que presenta las bases para dar un ejemplo al resto del mundo. En el México de hoy, existe una consciencia importante para alejarse de la ruta de desarrollo actual que es dañina y que ha sido implementada de manera implacable en los Estados Unidos y en otros países del mundo.

La población de México y su gobierno siempre han tomado una posición proactiva, constructiva y positiva con respecto a acuerdos ambientales, como el Acuerdo de París. Existe un deseo honesto de tratar de progresar en la implementación de estos compromisos internacionales. Estamos presenciando un progreso impresionante en áreas como la transformación del sector energético que permitirá una adopción total y escalamiento de energías renovables.

Sin embargo, como en cualquier otra economía emergente, existe un largo camino para transformar otros sectores y cambiar paradigmas, con el fin de que la economía sea verdaderamente sustentable desde el punto de vista social y ambiental. El WSDF está para ayudar y ofrecer un espacio de pensamiento productivo y de intercambio de ideas entre líderes mexicanos e internacionales; y para aprender de las experiencias de otros países.

Se espera que a medida que las actividades del WSDF se expandan y crezcan rápidamente, este grupo podrá contribuir en la introducción de un cambio en la manera de pensar y en los valores con los que el mundo pueda implementar ajustes y moverse hacia una ruta de desarrollo sustentable.