Sección a cargo de Ana Díaz Madrid:

CDMX Septiembre 2017.- Justo ahora que los peques dejan la casa y entran a la guardería o a sus primeras aulas, una de las recomendaciones que hacen a los padres es que los bebés asistan sin pañal. Pero… ¿cómo asistimos a ese “milagro” en pocas semanas? Prinsel te lleva de la mano.

Para ellos todo es tan fácil cuando se lleva encima un pañal que los adultos cambian a diestra y siniestra; pero es verdad que llega un momento en que deben dejarlo y entonces se enfrentan a un intimidante WC que les parece enorme, frío y ruidoso, así que desde esa visión debemos saber que los niños necesitarán su tiempo.

En este proceso, Prinsel ha trabajado mucho, sabe que el desarrollo de los niños no debe estar ligado con el miedo, y que hay que acostumbrarlos poco a poco a dejar el pañal. En la primera fase, hay que decirles a los papás que los peques intentarán avisar, pero no lo harán con mucho tiempo de anticipación, así que es importante ser pacientes y tener cerca algo que se familiarice con un “bañito”.

Las opciones son varias, pero hay que poner atención que ellos aprenderán a usarlas con ayuda de los papás, con una motivación cada vez que lo logren. Los colores y figuras son importantes, ya que se las hacen más atractivas y fáciles de recordar.

La mayoría, por seguridad, están hechas de plástico, para adaptar las temperaturas en la piel del bebé, y lo importante es que realmente se adapten a ellos para evitar derrames o salpicaduras. Limpiarlas es práctico con agua, jabón, toallas húmedas o previniendo cada momento con alguna bolsa al interior que podamos cerrar y desechar.

Hay que tomar en cuenta que una vez que los niños se adapten al proceso de una nica, será más fácil acoplarlos al uso de un WC, quizá con el apoyo de un reductor de asiento más pequeño para que se sientan seguros.

En el caso de los niños, también será útil tener en el hogar un banco, que le permitirá usar el WC de los adultos de manera más práctica.

Aprender lleva su ritmo, pero hagamos del adiós al pañal un momento menos caótico, finalmente, después de los 10 meses y antes de los 18, será indispensable que lo logren.

Aquí algunos de nuestros productos Prinsel:

Nica Tortuga: Fabricado en plástico de alta resistencia, con materiales no tóxicos. Diseño novedoso de fácil limpieza. Asiento con bordes redondeados para una mayor comodidad del bebé. Con altura baja que le será más sencillo de usar. Disponible en verde, rosa, azul y amarillo. Edad recomendada de 1 a 3 años.

Entrenador Kelo 4 En 1; Aprender a ir al baño será más divertido y cómodo con el entrenador Kelo 4 en 1. Es bañito, reductor, banco y contenedor. Con diseño novedoso es fabricado en plástico de alta resistencia, materiales no tóxicos y asiento ergonómico removible para una fácil limpieza. Con deflector para evitar escurrimientos; así como patas antiderrapantes. Edad recomendada de 1 a 4 años.

Entrenador Pingüino Boy 4 en 1; Aprender a ir al baño será más divertido y cómodo con el entrenador Pingüino 4 en 1. Es bañito, reductor, banco y contenedor. on diseño novedoso es fabricado en plástico de alta resistencia, materiales no tóxicos y asiento ergonómico removible para una fácil limpieza. Con deflector para evitar escurrimientos; así como patas antiderrapantes. Edad recomendada de 1 a 4 años.

Entrenador Smart Rs: Aprender a ir al baño será más divertido y cómodo con el entrenador Smart 3 en 1. Es bañito y reductor. Con diseño novedoso. Fabricado en plástico de alta resistencia, con materiales no tóxicos. Asiento ergonómico con contenedor removible para una fácil limpieza. Con sonido electrónico de una divertida canción. Con deflector para evitar escurrimientos.

Patas antiderrapantes. El asiento es removible para usarlo como reductor en el baño. Cerrado es un práctico banco. Edad recomendada de 1 a 4 años. Disponible en azul con blanco y rosa con blanco.