Sección a cargo de G. Adolfo Ruiz J.

México, D.F agosto 2015.- El Centro Engel, en el marco de la celebración de su Trigésimo Tercer aniversario, llevó a cabo una serie de conferencias sobre “Salud Gastrointestinal” en la Unidad de Congresos del Hospital Español, dónde se dieron cita especialistas nacionales para hablar de la Inflamación Intestinal, un huésped maligno y silencioso que habita en el sistema digestivo y responsable de la primera causa de consulta médica en nuestro país.

Por ello el Dr. Marcos Artola Minor, especialista en Medicina Estética y Longevidad, por el Instituto de Estudios Superiores de Medicina, explicó acerca de los probióticos: son “microorganismos vivos que promueven beneficios en la salud del organismo”. Alimentos que destacan por sus cualidades nutricionales y contribuyen al adecuado funcionamiento de la flora intestinal, ya que introducen bacterias benignas en el organismo.

“Las bacterias que contienen los alimentos y productos con prebióticos favorecen la absorción de nutrientes y minerales como zinc, calcio, magnesio, y hierro, equilibrando la influencia directa de la flora intestinal y mejorando la digestión”, Los Probióticos y prebióticos fortalecen la flora intestinal, enfatizó.

Si se consumen probióticos al menos 2 veces al día aumenta la función inmunológica, evita el estreñimiento, padecimientos cardiovasculares, diabetes y enfermedades que afecten al intestino. Las bacterias lácticas inhiben el crecimiento de diversos microorganismos dañinos, favoreciendo el equilibrio del organismo y activando el funcionamiento de las enzimas. Es importante que se incluyan en la dieta diaria, subrayó el también integrante de la Federación Internacional de Medicina Bío-Regenerativa.

Gysel Ramírez; Nutrióloga del Centro Engel, mencionó: “Cabe destacar que el 70 % del sistema inmunológico reside en el intestino, sin embargo hay peligro para nuestro sistema gástrico el consumo de alimentos nocivos, que a largo plazo debilitan nuestra salud.

Puede detonarse desde la infancia pero, hay un pico en personas de entre 25 y 60 años de edad, afecta a mujeres y hombres por igual, derivados del estrés, la ingesta excesiva de alimentos refinados, grasas, aditivos (saborizantes y conservadores) y sustitutos de azúcar.

La falla en el sistema gastrointestinal está asociada con la inflamación generalizada de todo el organismo, desencadenando un desorden en el funcionamiento hormonal, endocrino, cardiovascular y metabólico, el cual, se expresa con Diabetes, Síndrome Metabólico y Obesidad, agravamiento de Artritis y Alergias, así como una toxicidad generalizada asociada al desarrollo del cáncer. Su permanencia mantiene al sistema nervioso irritable, con una sobre reacción del sistema inmunológico. Cerca de un 80 % de la población mexicana presenta en algún momento de su vida, algún tipo de inflamación intestinal, la cual, está presente en la mayoría de los padecimientos o en el curso del tratamiento de estos mismos.

Por ello, dijo la especialista, es importante estar alerta ante síntomas como: hinchazón acompañada de dolor abdominal, diarreas o estreñimiento, malestar articular, contracturas musculares, irritación de la piel frecuente sin causa aparente; infecciones del sistema respiratorio, agotamiento físico y falta de claridad mental.

La relación entre la dieta y la salud es vital, por lo que existen alimentos funcionales con nutrimentos poderosos que se convierten en aliados indispensables en la disminución de este padecimiento y que podemos incluir cotidianamente, entre ellos la cúrcuma, el romero, aceite de olivo, los berros, el té verde, alimentos fermentados, los cuales contienen propiedades benéficas para el sistema digestivo.

Que además, se acompañan por cepas específicas de lactobacilos (NCFM) y concentrados de ácido grasos Omega 3 de alta pureza que contribuyen a la reparación de la pared digestiva y nutren a fondo el tejido intestinal, en vez de solo “paliar” el dolor, sin promover la reparación del tejido, como sucede con los fármacos, expresó la nutrióloga

En su oportunidad, la directora General del Centro Engel, la Química María Engel, se refirió al papel decisivo que desempeñan los nutrientes (Glutamina y Glicina),  que son poco valorados para la salud del sistema digestivo.

“La Glutamina equilibra el pH del cuerpo evitando que se acidifique, favorece la regeneración de las vellosidades del intestino para mejorar la absorción de los alimentos, evita la acidez gástrica, nutriente indispensable para las células inmunológicas, retarda la destrucción muscular durante el ejercicio y promueve la construcción muscular nueva”, puntualizó.

Si falta en el organismo se generan padecimientos inflamatorios del intestino como la colitis, mala absorción de alimentos y desnutrición, ulceraciones, provocando una infestación de microorganismos patógenos. La Glicina indispensable para los mecanismos de limpieza de metales tóxicos y su excreción del cuerpo. “Es un aminoácido importante en la salud del cerebro, participa en el control natural del estrés, ansiedad y depresión, además estimulante de la cicatrización, componente del colágeno y coadyuva en el adecuado metabolismo de la glucosa”.

"Su deficiencia agrava la acumulación de toxinas en el cuerpo y la inflamación de muchos tejidos acelerando el envejecimiento de nuestro cuerpo, su  ausencia provoca una mala cicatrización y reparación de tejidos, aumentando el riesgo de padecer diabetes y enfermedades virales”, concluyó  la Fundadora del Centro Engel.