Por G. Adolfo Ruiz J.

México., D.F. diciembre 2014.- Ante este problema que afecta generalmente a mayor número de personas de la tercera edad,  pero también a jóvenes y adultos que por accidentes, malformaciones genéticas, tienen que usar una prótesis dental completa y esto no les permite asistir a reuniones, platicar, comer  y mucho menos reír lo que causa aislamiento social además en algunas ocasiones desnutrición por  la deficiente masticación y esto provoca alteraciones gastrointestinales.

Fue así que Berenice Escuadra; Responsable de Categoría de Cuidado Bucal cuidado bucal en los laboratorios GlaxoSmithKline (GSK) México y  Gabriela Cajiga, Psicomotricista, egresada del Instituto Superior de Psicomotricidad y Relajación, en Paris, Francia, quienes nos presentaron de manera practica lo que pasan las personas cunado no pueden sonreir.

Los expertos, la salud bucodental comentaron la influencia sobre las actividades que se realizan con regularidad, como comer, hablar, lavarse los dientes, relajarse, mantener un estado emocional ecuánime, dormir, trabajar y disfrutar el contacto con la gente . Cuando una persona sufre la pérdida de una o varias piezas dentales, todos los elementos mencionados presentan cambios considerables.

Ésta es la historia de Rosalía, una mujer de 55 años quien debido a un accidente que tuvo hace un par de años perdió varias de sus piezas dentales, por lo que recurrió a su odontólogo para tener una prótesis dental, y desde entonces muchas cosas en su vida cambiaron.

Un día simplemente dejó de comportarse como solía hacerlo, no quiso reunirse con sus amigas, se negó a salir a comer como solíamos hacer cada sábado, evitaba sentarse a la mesa con el resto de la familia a la hora de la comida; pero lo que en definitiva me hizo darme cuenta de que algo andaba mal, fue que revisando fotos de los últimos cumpleaños de los nietos, ella no sonreía como antes y su mirada era triste.

Nunca dijo nada, creo que mamá no quería preocuparnos y siempre ha sido muy reservada cuando de sí misma se trata. Siempre está dispuesta a escuchar, a dar un consejo; pero hablar de lo que ella siente o incluso si tiene algún malestar, prácticamente hay que adivinarlo. Jamás imaginé por lo que estaba pasando y por supuesto no tenía idea de cómo ayudarla.

Platicando con un amigo me recomendó que llevara una bitácora de todas aquellas actividades en las que mi mamá no se comportara de forma usual; es decir, si los jueves se reunía a desayunar con sus amigas o si ya no lo hacía, si cambiaron sus hábitos de alimentación y que tratara de identificar las cosas que ella evitaba. Coincidieron dos cosas, los momentos de comer y platicar, todo aquello que implicara mostrar sus dientes.

Lo primero que hice fue reunir a la familia, entonces les hice notar a mis hermanos que mamá ya no era la misma, la relación que descubrí entre sus cambios de hábitos y el uso de su prótesis dental y lo importante que como familia busquemos la forma de ayudarla. Manuel, el más pequeño de mis hermanos, nos platicó que en redes sociales encontró un video que podía ser de gran ayuda.

Es un proyecto llamado “Nunca dejes de sonreír” y que a través de él  se  explican justo las situaciones por las que atraviesan las personas que han sufrido alguna pérdida de piezas dentales, un caso real de madre e hija, en el que la mamá dejó de hacer cosas que le gustaban por temor a que la prótesis dental  se moviera de su lugar mientras comía o hablaba.

El cambio fue inmediato, mamá no sólo recuperó su sonrisa, sintió de nuevo la capacidad de disfrutar su vida sin temores y regresó a ser la misma de antes. Verla feliz no sólo nos hace sentir tranquilos, a ella le asegura que siempre estaremos a su lado cuando más nos necesite. Si conoces a alguien que pudiera estar en una situación similar, no lo dudes, en  visitar el sitio y cambia su vida.

La respuesta era muy simple, utilizar un adhesivo para prótesis dentales, una forma muy sencilla de devolver a las personas la confianza de realizar actividades cotidianas. Además, a través de la página www.nuncadejesdesonreir.com se puede adquirir un kit de producto y no solo eso, el envío es totalmente gratuito en pro de ayudar a que más gente recupere la confianza de  sonreír. El kit tiene un precio de $99.00 pesos y se entrega a domicilio sin costo extra.