Sección: ESPECTÁCULOS


LA OFCM INTERPRETARÁ ESTE FIN DE SEMANA OBRAS DE VON WEBER, SCHUMANN Y BRAHMS.

* Repite el director israelí Avi Ostrowsky al frente de la Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM), que interpretará diferentes obras clásicas.

Redacción:

La obertura de la ópera El cazador furtivo, de Carl Maria Von Weber, considerada su composición más importante; la Sinfonía No. 4, de Robert Schumann, y la Sinfonía No. 4, de Johannes Brahms, serán las obras que interpretará este fin de semana la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM) en la Sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli

En el décimo programa de su Temporada 2013, la agrupación capitalina, una de las orquestas más reconocidas a nivel Latinoamérica, tendrá nuevamente como director huésped al maestro israelí Avi Ostrowsky, invitado por la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México.

Avi Ostrowsky es originario de Tel Aviv, Israel, donde estudió con Gary Bertini y Mordechai Seter en la Academia Rubin. Continuó su formación con Hans Swarowsky, en la Academia de Música de Viena y con Franco Ferrara en Italia.

En 1968, ganó el primer lugar en el Concurso Internacional Nikolai Malko para Jóvenes Directores en Copenhague y desde entonces ha sido invitado a dirigir numerosas orquestas en todo el mundo. En 1970 fundó la Orquesta Kibbutz de Israel y mantuvo su dirección hasta 1974.

Obertura de la ópera El cazador furtivo, de Carl Maria Von Weber

Es en el ámbito de la ópera donde Carl Maria Von Weber  (1776-1826) creó la que hasta la fecha es considerada como su obra más importante y duradera: Der Freischütz (El cazador furtivo), compuesta en 1820 y catalogada como la primera gran ópera alemana.

El libreto de la obra fue escrito por Friedrich Kind, quien se basó en una serie de cuentos franceses anónimos, recopilados por Johann August Appel y Friedrich Laun. El estreno de El cazador furtivo se llevó a cabo en Berlín el 18 de junio de 1821, bajo la dirección del propio Weber, y en un principio no tuvo el éxito deseado, básicamente por la oposición de aquellos que defendían la supremacía de la ópera italiana.

Sin embargo, en octubre de ese mismo año fue producida por segunda vez y triunfó de tal manera que de inmediato se convirtió en la piedra angular del gran edificio de la ópera alemana.

 Sinfonía No. 4, de Robert Schumann

Suele considerarse a esta sinfonía como lo mejor de la producción de Robert Schumann (1810-1856), opinión que fue establecida por sus contemporáneos. Esta sinfonía es la segunda escrita por el compositor, aunque hoy se conoce como la cuarta de su catálogo. Fue estrenada en 1853 y publicada ese mismo año y, si bien consta de cuatro movimientos, siempre fue la intención del autor que se tocara en forma continua, sin interrupciones.

 Sinfonía No. 4, de Johannes Brahms

La sinfonía fue compuesta entre 1884 y 1885 por Johannes Brahms  (1833-1897). El estreno oficial lo hizo Hans von Bülow, quien preparó concienzudamente a su orquesta para el concierto que dirigió el mismo Brahms el 25 de octubre de 1885. Los cuatro movimientos de la obra tienen como valor fundamental su solidez formal y la total ausencia de material superfluo.

Estos conciertos se podrán escuchar el sábado 16 a las 18:00 y el domingo 17 de marzo a las 12:30 horas, en la Sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli (Periférico Sur 5141, colonia Isidro Fabela, a un costado de la Escuela Nacional de Antropología e Historia).

Admisión: 122 pesos, con 50% de descuento a estudiantes, maestros y adultos mayores con credencial. El horario de taquilla es de martes a viernes de 9:00 a 15:00 y de 16:00 a 18:00 horas.; sábados de 13:30 a 19:00 y los domingos permanece abierta de 10:30 a 13:30 horas.


Publicado: 13/03/2013