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Redacción:
Las leyes que garantizan los espacios públicos cerrados 100 % libres de humo de tabaco (como sucede en Tabasco, DF y ahora también en Morelos), no pueden considerarse un factor de riesgo para la permanencia de los negocios nocturnos.
Es importante señalar que los dueños y gerentes de los negocios de hospitalidad y convivencia (bares, restaurantes, cafeterías, discotecas, etc.) son necesariamente co-responsables para garantizar un ambiente libre de humo de tabaco. Son, efectivamente, lugares donde se busca una ganancia, además de dar un buen servicio, pero las ganancias no pueden plantearse a costa de la salud, cuestión ésta en la que coinciden la gran mayoría de restauranteros.
En realidad, la finalidad de estos centros o lugares es la recreación social; el consecuente provecho económico que se obtiene es fundamentalmente derivado del buen servicio, calidad y alternativas de negocio como podrían ser tal o cual tipo de comida o repostería, música en vivo y conceptos de diseño o moda para recrear. ¿Y el tabaco?, pues se trata de un elemento totalmente prescindible que, de ninguna manera, podría considerarse crucial para la subsistencia de los negocios de hospitalidad. Diríase que suprimir el tabaquismo en bares y restaurantes más que perjudicar beneficia.
Garantizar la calidad en los negocios de restauranteros y bares, debe acompañarse de leyes que apoyen los espacios 100 % libres de humo de tabaco. Ello trae beneficios de diversa índole pues no ponen en riesgo la permanencia de negocios diurnos y nocturnos, ni impactan de manera negativa en la economía de los negocios.
El Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI) y el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), realizaron un estudio en restaurantes, centros nocturnos, bares y cantinas para evaluar el impacto de la Ley de Protección a la Salud de los No Fumadores (LPSNF), tras la entrada de vigor de esa Ley en el Distrito Federal. El resultado, como se aprecia en la gráfica abajo expuesta, nos indica que el comportamiento económico de los restaurantes (ventas, empleo y remuneraciones pagadas a los trabajadores) se mantiene estable en comparación con los estados donde no se aplicó la ley de espacios 100 % libres de humo de tabaco (Jalisco, Nuevo León y Estado de México).
Existe una caída en el desempeño económico de los restaurantes luego de la aprobación de la ley (marcada con la línea roja y equivale al inicio de 2008), pero ello sucede tanto en el DF como en los estados con los que se comparó y se debe a una caída de la economía en general y no por causa de la aplicación de la ley.
Average monthly revenues in restaurants, Mexico City (MC)and comparison group (thousands of April 2009 pesos). Source: Monthly Services Survey, National Institute for Statistics and Geography (INEGI).
Por ello, es posible concluir que no existe evidencia de que la LPSNF, tenga efectos económicos adversos sobre los ingresos, remuneraciones y empleo de los centros de hospitalidad y convivencia. Cabe destacar que “diversos estudios internacionales similares concluyen que los ambientes libres de humo de tabaco, son una medida efectiva de protección a la salud de la población y son inofensivos económicamente para la industria de la hospitalidad” [1]. No está de más sostener que se incrementa el índice de clientes debido a que son mayoría quienes no fuman y se reduce el ausentismo por enfermedades.
Desde la perspectiva de la salud, la evidencia científica ha demostrado que la exposición del humo de tabaco, para quien no fuma puede ser causa de cáncer pulmonar, enfermedades cardiovasculares y de infecciones bronquiales. En este sentido, la ley protege a los trabajadores, dueños de restaurantes y bares y grupos vulnerables (niños, mujeres embarazadas, grupos de la tercera edad y gente quien ya padece alguna afección respiratoria) que están expuestos al humo de segunda mano.
Además, los espacios 100 % libres de humo de tabaco ayudan a siete de cada diez fumadores que quieren dejar de fumar, la prevalencia de fumadores se reduce y el ambiente deja de ser propicio para potenciales fumadores.
El reconocimiento creciente de los dueños de negocios de hospitalidad para garantizar la calidad de los servicios implica garantizar la salud. En este sentido hay restauranteros que declaran a sus negocios como ambientes 100% libres de humo de tabaco con carteles de la Comisión Federal para Prevención de Riesgos Sanitarios (COFEPRIS); pues las leyes para el Control del Tabaco son, de manera coincidente, salud para la economía del negocio.
Referencia:
[1] El impacto económico de la Ley de Protección a la Salud de los No Fumadores del Distrito Federal. Instituto Nacional de Salud Pública, Departamento de Investigación sobre el Tabaco, Marzo de 2011.