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Redacción:
Puebla, Puebla.- La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), defiende una vez más el desarrollo turístico, Cabo Cortés a realizarse en los próximos 30 y 40 años, el cual, dice, no sólo cumple con los lineamientos que establece la ley ambiental sino que es sustentable y tiene altas posibilidades de desarrollo.
Así responde el Subsecretario de Gestión para la Protección Ambiental de la Semarnat; Mauricio Limón, a las críticas de organizaciones ambientalistas como Greenpeace en el sentido de que este desarrollo traerá afectaciones al arrecife de Cabo Pulmo. “Hoy puedo decirle que Cabo Cortés es un proyecto que no pone en riesgo a los arrecifes”, dijo.
Además: “No se trata de que lo ambiental predomine sobre lo social o económico, pero tampoco se trata de que lo ambiental sea el patito feo. Se trata de que haya una armonía que se logra a través de una serie de instrumentos, entre ellos la Manifestación de Impacto Ambiental, la cual busca saber cuáles son los impactos eventuales sobretodo sobre en los arrecifes, humedales y manglares y, hoy la población en general tiene una mayor conciencia de protección”, indica.
Mauricio Limón detalla que este proyecto, que contempla casi el 70% de conservación de las 3,800 hectáreas donde se planea construir, se autorizó hace tres años y que, por un recurso de revisión, se determinó analizar nuevamente la MIA, acción que derivó en una nueva autorización.
Durante su participación en el “Día de Iberoamérica” en el Foro: El Estado de las Evaluaciones de Impacto Ambiental, que se llevó a cabo en el Centro de Convenciones de la ciudad de Puebla, Mauricio Limón, comenta en entrevista de la gestión ambiental en México y dice que el gobierno federal se ha destacado por exigir a los proyectos de cualquier tipo en nuestro país que “muestren una MIA (Manifestación de Impacto Ambiental) que los certifique como proyectos sustentables en materia de medio ambiente”.
El funcionario federal agrega que estos mecanismos “han sido bien vistos por los desarrolladores”, ya que se ha reducido el tiempo de aprobación de los proyectos en general al pasar de 10 meses a 4 meses como máximo.
En el caso de Cabo Cortés éste lleva más de tres años estudiándose por Semarnat, la cual aprobó el proyecto por dos ocasiones, un hecho inédito en la historia de registro de proyectos.
El proyecto es viable y la información que se recabe en este año y en 2012, dado que se solicitó un monitoreo de 24 horas al día- particularmente de batrimetría, de corrientes marinas, de química de agua- factores que nos garanticen que el modelo que estamos utilizando es confiable, y es confiable según los expertos. Queremos que este grado de confiabilidad sea casi total”, expresa el funcionario federal.
De hecho, antes de que la Semarnat solicitara información sobre batrimetría y del comportamiento de corrientes marinas, Hansa Baja Investments inició en 2010, por iniciativa propia, una serie de estudios multidisciplinarios que encargó al Centro de Investigaciones Biológicas del Noreste (CIBNOR) de Baja California Sur, instancia con prestigio a nivel internacional que realizó un estudio oceanográfico-biológico de litoral marino en el entorno de Cabo Cortés y Cabo Pulmo midiendo unos 30 parámetros (salinidad, corrientes, ph, mareas, sedimentación, etcétera).
En entrevista David Urias Laborín; ingeniero del área de ingeniería marítima del Laboratorio de Manejo Costero del CIBNOR detalló: “Desde octubre de 2010 estamos trabajando en topografía para ver la variabilidad anual de los perfiles de playa. También tenemos equipo instalado en el fondo del mar para ver mediciones de mareas, de la velocidad y de la dirección de las corrientes, así como los parámetros de oleaje”.
El experto agregó que cada mes y medio se baja la información de los equipos para ver la variabilidad anual (cómo se comporta) y posteriormente se vuelven a instalar en el fondo marino para seguir recogiendo datos e información. Para estos estudios están trabajando alrededor de 70 personas, entre ellos biólogos marinos e ingenieros marítimos, ecólogos.
Por otra parte, el vocero de la Semarnat; Sergio Ramírez, quien ha respondido a Greenpeace, a través de diversos medios de comunicación mencionó: “Sólo confunde a la ciudadanía respecto a sus críticas respecto al proyecto”, y aclaró que: Cabo Cortés “No dañará de ninguna forma ni el arrecife de Cabo Pulmo ni el ecosistema en su conjunto”. Señaló que Hansa Baja Investments, se comprometió a cumplir en tiempo y forma con las condicionantes que le impuso la Semarnat en el resolutivo que emitió en marzo pasado.
“La Autorización de Impacto Ambiental (AIA) se otorgó de manera parcial y condicionada en total respeto de todo el marco normativo ambiental mexicano desde una perspectiva amplia, sistémica y sistemática, y no limitativa y gramatical, como Greenpeace y otras organizaciones han pretendido que se aplique la ley”, recalcó el vocero, a través de una carta aclaratoria publicada en la revista Proceso de esta semana como respuesta a un reportaje que difundió en su número 1802 con fecha del 15 de mayo del presente año.
Reitera que la decisión de la Semarnat de aprobar el proyecto Cabo Cortés, en el que se planea primero, antes de levantar alguna obra, rescatar áreas de conservación de flora y fauna, fue una decisión avalada por la dependencia en su conjunto para el resolutivo final. Por último, el director de Cabo Cortés; Jesús Guilabert Boyer , refrenda su compromiso en el respeto y cumplimiento de las leyes ambientales.