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Por G. Adolfo Ruiz J.
CDMX 04 julio 2017. Directivos de 25 organizaciones civiles de la República Mexicana forman una fuerte alianza, ante la necesidad de garantizar el derecho a la salud de su comunidad, quienes demandaron a las autoridades tomar una postura unificada y acciones puntuales para la atención integral de la diabetes tipo 1 (DM1), en México.
Este tipo de diabetes se conoce como insulinodependiente, es decir se requiere de insulina para evitar las hiperglicemias (glucosa elevada), que se generan después de los alimentos, sobre todo evitar las graves consecuencias como ceguera, amputaciones, daño renal (insuficiencia renal), las que para su tratamiento generan altos gastos, una mala calidad y cantidad de vida.
Fue así que la Dra. Elisa Nishimura Meguro, Representante de la Sociedad Mexicana de Endocrinología Pediátrica, señaló: “Ésta es una de las condiciones que más requieren la participación activa del paciente y su familia. El contar con los insumos necesarios y la capacitación en el cuidado de su competencia (educación en diabetes) es imprescindible para el control de esta condición”.
En nuestro país, la atención afronta grandes retos como; la falta de estadísticas precisas, la nula o insignificante asignación de presupuestos y recursos específicos para el cuidado de estos pacientes; la falta de educación médica adecuada, resultando en la carencia de un tratamiento estandarizado en las instituciones de salud, así como la falta de una cobertura pública para un tratamiento integral.
Asimismo la Dra. Angélica Martínez Ramos Méndez, Endocrinóloga Pediatra y Secretaria General de la Sociedad Mexicana de Pediatría, señaló: “La DM1 requiere de un tratamiento completo por parte de la familia, los profesionales de la salud, para tener un control óptimo”. La atención de la DM1 representa 40% a 50% del ingreso promedio, lo que pone a las familias en riesgo de empobrecimiento por motivos de salud, además de exponer al paciente a complicaciones crónicas e incluso la muerte por falta de insumos para su control.
Ante este panorama, la Federación Mexicana de Diabetes, A.C. y Con Diabetes Sí Se Puede, I.A.P., han convocado a otras 23 asociaciones civiles de todo el país, y las que deseen sumarse a unir esfuerzos para una atención integral en DM1.
En su participación, Gisela Ayala, Directora Ejecutiva de la Federación Mexicana de Diabetes, A.C., precisó: “En el sistema de salud en México se han logrado algunos avances, pero nos enfrentamos a nuevos retos, principalmente en la población más vulnerable, que vive con DM1, que afecta igual a niños, jóvenes y adultos. Por ello, confiamos que la colaboración de todos los actores y la sociedad civil organizada, podremos lograr mejores condiciones o mejor calidad de vida para quienes la padecen”.
El movimiento llamado “Por una sola voz en la diabetes tipo 1” engloba las necesidades más apremiantes de las personas con diabetes tipo 1 en 6 puntos:
1.- Atención; en tiempo y forma de la DMT1. Las personas requieren un diagnóstico oportuno, medicamentos y servicios multidisciplinarios así como el uso de tecnología de última generación garanticen una calidad de vida óptima.
2.- Diferenciar: los tipos de diabetes. Estas tienen diferentes causas, características y tratamientos, lo que hace imperativo especificar el tipo de diabetes en documentos oficiales, campañas informativas, guías de tratamiento, etc. Con ello se promueve un mejor enfoque terapéutico, económico y social de la DMT1, cuya causa no está ligada a hábitos alimenticios o de actividad física y no puede prevenirse.
3.- Impulsar: un Registro Nacional de Personas con DMT1. Que permita el diseño de políticas públicas y la asignación de recursos para su atención.
4.- Homologar: la atención de la DMT1. Se requiere estandarizar el manejo y control en cualquier institución pública o privada para mejorar la atención de los niños y adultos que viven con esta condición en nuestro país.
5.- Garantizar; el acceso completo a insumos para el manejo dela DMT1. Para sobrevivir, las personas dependen toda su vida de un tratamiento que incluye insumos: Insulina, dispositivos para su aplicación como jeringas, plumas o microinfusoras de insulina; medidores de glucosa; de 4 a 7 tiras reactivas al día para la medición de glucosa; lancetas y punzores.
6.- Reforzar: la capacitación de médicos y personal de salud. Sobre las terapias actuales, costo-efectivas, basadas en evidencia que permitan un manejo óptimo.
Por todo lo anterior las asociaciones firmantes invitan a autoridades, servicios médicos, hospitales, industria y población en general, a unirse por una sola voz en la DM1, a través de la conversación en redes sociales utilizando el hashtag #Diabetes1SolaVoz.
La glucosa es la cantidad de azúcar que el organismo absorbe a partir de los alimentos, con la finalidad de aportarle la energía necesaria para poder realizar diferentes funciones. El éxito en el tratamiento depende de llevar un buen control de los niveles de glucosa en ayunas es de 70 a 100 mg/dL. Dos horas después de comer: Menos de 140 mg/dL, (hemoglobina glicosilada) HbA1c menos de <7, cuidados nutricionales (no grasas, azucares, alcohol etc.), actividad física, entre las principales, concluyeron los expertos.