* No se trata de un incremento a los impuestos, sino de un esfuerzo de la industria por ajustar su margen de ganancias.
Redacción:
México D.F., a 22 de enero de 2013. Desde la semana pasada, la industria tabacalera promovió un incremento de 1 a 2 pesos en las cajetillas de cigarros en sus distintas marcas.
Al parecer, esto se derivó de un consenso entre las dos mayores empresas tabacaleras en México, Philip Morris (PM) y British American Tobacco (BAT), para imponer un incremento generalizado a los precios de sus productos, el cual ya está siendo aplicado en distintos establecimientos y puntos de venta.
La Fundación InterAmericana del Corazón México, aclara que este incremento a los precios no se debe por ajustes de los impuestos específicos a productos de tabaco, sino a los propios intereses de la industria por ajustar su margen de ganancias.
De acuerdo con las recomendaciones del Convenio Marco de la Organización Mundial de Salud para el Control del Tabaco (CMCT), el incremento de los precios a productos de tabaco, vía impuestos, es la estrategia más importante para reducir el consumo de cigarros y para inhibir el inicio de consumo, principalmente entre menores de edad.
El último incremento aprobado por el Congreso de la Unión fue en 2010, cuando el impuesto específico por cajetilla aumentó 7 pesos. Para este año no se autorizó un incremento a los impuestos a productos de tabaco.
Frente a esto, el maestro Erick Antonio Ochoa; Director de Iniciativas para el Control del Tabaco de la Fundación InterAmericana del Corazón (FIC) México, mencionó “el incremento de precios autorizado por la industria tabacalera en los últimos días es una decisión unilateral para ajustar su margen de ganancias, que no aporta a los ingresos del Estado.”
“La industria tabacalera es incongruente en su discurso. Cuando ellos unilateralmente deciden aumentar los precios a sus productos no se genera contrabando, pero si es el Estado quien aprueba un aumento de los impuestos a sus productos para mejorar la atención de enfermedades asociadas a su consumo, ahí sí, en opinión de ellos, se promueve el contrabando”.
“Es importante destacar que la sociedad civil hemos promovido que los legisladores del Congreso de la Unión aprueben un incremento generalizado y significativo a todas las cajetillas de cigarro, a través del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), como ocurrió en 2010”.
“En aquella ocasión, aunque se logró un importante incremento, éste no fue suficiente ni el que recomendamos el bloque de organizaciones sociales, académicas y de padres de familia, ni tampoco se logró indexarlo a las tasas de inflación anuales, cosa que reduce la efectividad del impuesto, para fines de prevención”.
“Este año, la sociedad civil organizada buscaremos alcanzar el incremento ideal, recomendado por la OMS, durante la discusión de la reforma fiscal integral que propondrá el Ejecutivo Federal”, finalizó Erick Antonio Ochoa.