Por G. Adolfo Ruiz:

Con la llegada de la temporada de fríos aumentan los padecimientos respiratorios como los cuadros gripales, amigdalitis, faringitis y sinusitis, que si no se tratan a tiempo se complican aún más con problemas broncopulmonares, Un síntoma cardinal es la fiebre que suele aparecer de repente y hay que controlarla con un medicamento seguro, en los niños además debe ser de sabor agradable para que se lo tomen y evitar  el cuadro febril y dolor corporal que presentan.

“Amigdalitis”, es una infección de la garganta donde están las  amígdalas que se encuentran en los lados posteriores de la lengua se pongan rojas, sensibles e inflamadas y  forman parte de las defensas del organismo, su nombre  común son  anginas. La enfermedad es ocasionada por algún virus o bacteria y es una enfermedad infecciosa por lo mismo contagiosa.

Se transmite por medio de la tos, estornudos y por contacto directo presentándose  con más frecuencia en niños de 6 a 12 años, sin exceptuar a los menores.

Los niños con amigdalitis deben permanecer en casa con reposo y no enviarlos a la escuela o a la guardería hasta que haya una mejora, esto ayuda a reducir la propagación de la enfermedad, es decir, que no se contagien entre sí.

Los casos de amigdalitis son mucho más frecuentes durante la temporada invernal, aunque se presentan todo el año, durante el verano uno de los factores es la propagación de polvo. Aumento del tamaño de las amígdalas.-Enrojecimiento de la garganta.- Puntos blancos en amígdalas- Dolor de garganta- Fiebre- Dolor de cabeza- Disminución del apetito- Dolor al tragar. En algunas ocasiones problemas para respirar

Alerta: Reduce la fiebre, elimina el dolor y la inflamación con un medicamento seguro y eficaz como MOTRIN® (para bebés a partir de 6 meses). Aplica compresas de agua tibia para calmar la fiebre. Dale a tu niño mucho líquido y aliméntalo con comida nutritiva. Toma frecuentemente la temperatura. Deja que descanse, el reposo siempre ayudará a tu niño a recuperarse más rápido. Pon un humificador en el cuarto de tu hijo para que hidrate su garganta. Lávate las manos constantemente mientras estés en contacto con él.

“SINUSITIS”: infección ocasionada por la aparición de bacterias en los senos paranasales,  son los espacios de aire que se encuentran dentro de los huesos de la cara. La infección generalmente es el resultado de la obstrucción en los orificios que drenan los senos hacia la nariz. Es causada generalmente por bacterias, alergias, contaminación ó pólipos nasales. Existen dos tipos de sinusitis:

Sinusitis aguda ó intermitente: tiene una duración menor a 12 semanas, con recuperación completa de los síntomas. Sinusitis crónica ó persistente: tiene una duración mayor a 12 semanas, sin recuperación completa de los síntomas.

Esta enfermedad es más común en la época invernal a causa de las complicaciones de las enfermedades respiratorias, así como para los niños que padecen algún tipo de alergia

Síntomas: Nariz tapada. Secreción nasal amarillenta. Fiebre. Dolor de cabeza detrás de los ojos, en medio de la frente o sobre los ojos. Dolor en la zona posterior de los dientes superiores. Tos. Inflamación, calor o sensibilidad en las áreas de los senos paranasales.

Alerta: Si su hijo presenta estos síntomas te recomendamos administrar un medicamento seguro y eficaz como MOTRIN® para reducir las molestias que causa la sinusitis. Administrarle a tu niño muchos líquidos, ya que ayudan a que los senos drenen fácilmente. Utiliza compresas de agua tibia para aliviar el dolor facial (4 veces al días por 1 ó 2 horas). Humedece su nariz con solución marina. Toma con frecuencia la temperatura de tu niño. Utiliza un humificador para humectar sus áreas nasales. Dale de comer frutas y verduras ricos en antioxidantes y vitamina C. Reduce la fiebre, elimina el dolor e inflamación con un analgésico seguro y eficaz como MOTRIN® para bebés a partir de 6 meses.

“Faringitis”: Es una infección que ocasiona inflamación en la garganta. La causa generalmente un virus, pero también otros factores pueden causar dolor de garganta como la contaminación ambiental, el alcohol, alergias, bacterias y sustancias químicas.

Síntomas: Dolor de garganta intenso y constante, que puede aumentar al momento de pasar saliva o algún alimento, dolor de cabeza y/o muscular, por lo que te recomendamos administrar un analgésico seguro y eficaz como MOTRIN® para aliviar el dolor.

Inflamación: Si se presenta enrojecimiento, comezón, sensación de quemazón en la garganta y/o inflamación de los ganglios linfáticos, los cuales se encuentran en la parte lateral de la garganta entre el cuello y la cara, te sugerimos brindarle a tu bebé un antiinflamatorio como MOTRIN® que lo ayudará a desinflamar el área afectada*.

Fiebre: si se presenta un aumento temporal en la temperatura del cuerpo mayor a 37.5°C es recomendable administrarle al bebé un antipirético seguro y eficaz como MOTRIN® (para bebés a partir de 6 meses).

Es necesario acudir al Pediatra: si se presentan síntomas como: Presencia de bultos en el cuello. Erupción en la piel. Tos con secreciones verdes, amarillas o con sangre. Presenta fiebre superior a 37.5°C. Presencia de rigidez en el cuello. Si el niño tiene dificultad o es incapaz de tragar líquidos o alimentos. Si vomita, o es incapaz de mantener medicamentos. Presenta dificultad para respirar. Presenta dolor severo, enrojecimiento o hinchazón en cualquier parte del cuello.

Utiliza un humificador en el cuarto de tu bebé para humectar su garganta. Dale de beber suficientes líquidos. Dale alimentos suaves y fríos ya que causan menos molestias. Te recomendamos limitar las actividades del niño hasta que los síntomas desaparezcan.

Hacer gárgaras de agua caliente con sal para ayudar a disminuir las molestias de la inflamación de garganta (una cucharadita de sal en 1 litro de agua). Reduce la fiebre, elimina el dolor e inflamación con un analgésico seguro y eficaz como MOTRIN®.

Báñalo con agua tibia y una esponja. Nunca lo bañes con agua fría, no apliques hielo ni fricciones con alcohol. Estos podrían causar escalofríos, elevando aún más la temperatura del cuerpo. Consulta siempre a tu médico.