Sección a cargo de G. Adolfo Ruiz:

México, D.F., Septiembre 2012.- Para abordar el tema de las demencias en el ser humano, se dieron cita especialistas que pocas veces llegan a reunirse en torno a la enfermedad del Enfermedad de Alzheimer (EA), que una vez más se conmemora el próximo 21 de septiembre. Con la presencia de la Doctora Mariana Longoria, Doctora Dra. Ana Luisa Sosa, Doctor Fernando Rodríguez, Licenciado Ernesto Loboguerrero, Director de Merz Pharma, quienes expusieron el tema de esta demencia que cada día afecta más personas en el mundo.

Iniciando la presentación en el marco de la conferencia de prensa  con el lema: “Más tiempo conmigo mismo”, la Dra. Ana Luisa Sosa; Jefa del Laboratorio de Demencias del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía “Manuel Velasco Suárez”, comentó: “Las demencias son la primera causa de discapacidad en el adulto mayor, por lo que la Organización Mundial de la Salud las ha ubicado como un problema de Salud Pública que demanda atención prioritaria”,

La pirámide poblacional a nivel mundial y nacional se está invirtiendo, debido al incremento de la expectativa de vida y a la disminución de las tasas de natalidad, actualmente en México hay más de 10 millones de adultos mayores, entre los cuales más de 750,000 personas son víctimas de algún tipo de demencia, siendo la más frecuente la Enfermedad de Alzheimer.

“La Enfermedad de Alzheimer es un trastorno neuro-degenerativo, en la que ocurre muerte neuronal prematura y acelerada en regiones específicas del cerebro acompañadas de una serie de cambios moleculares que pueden ser causa o efecto de la misma. Existen factores de riesgo modificables que favorecen el desarrollo de esta enfermedad, como: enfermedades cerebro-vasculares,  hipertensión arterial, diabetes,  obesidad,  dislipidemias,  traumatismos craneoencefálicos, abuso de sustancias como alcohol y tabaco, la depresión y el estrés entre otras”.

Las áreas cerebrales más afectadas en la EA, están los lóbulos temporales y el hipocampo, estructuras estrechamente relacionadas con la memoria; así mismo entre otras alteraciones, se ha encontrado la disminución de un neurotransmisor llamado acetilcolina, siendo una de sus funciones el estimular a las neuronas relacionadas con la memoria; se ha hipotetizado que al no estar estimuladas éstas, mueren de manera prematura.

Las demencias son enfermedades que hasta ahora no tienen cura, y su evolución es progresiva, lo que  ocasiona que la persona pierda también en forma progresiva sus capacidades hasta depender por completo de un cuidador.

 “Hace unos años no contábamos con herramientas terapéuticas pero a partir de la década de los 80´s surgió un grupo de medicamentos llamados inhibidores de la acetil-colinesterasa, que al disminuir la destrucción de este neurotransmisor, favorecen la  estimulación a las neuronas colinérgicas, para continuar su función. Después surgió otro fármaco, la memantina, con un mecanismo diferente ya que interviene inhibiendo la actividad de un sistema excitatorio que favorece la muerte neuronal.

Este fármaco actúa como  neuro-protector, prolongando la vida de la neurona. Ambos grupos de fármacos tienen un efecto modesto que nos permite disminuir la velocidad del desarrollo de la enfermedad y de esta manera mejorar la calidad de vida de los pacientes afectados y sus cuidadores”, comentó la Dra. Sosa.

Es importante estar al tanto de los cambios cognitivos que pueden prestarse en  personas mayores a 60 años de edad, pues la edad es el principal factor de riesgo para el desarrollo de esta terrible enfermedad. Tener olvidos ocasionales no es signo de demencia o de Enfermedad de Alzheimer, sólo cuando éstos son progresivos e impactan la funcionalidad.

La demencia,  es un síndrome caracterizado por la decadencia progresiva del funcionamiento cerebral, que se manifiesta por deterioro intelectual, alteraciones de la conducta y del humor, así como cambios en la personalidad.

 La persona puede comenzar por notar que ya no puede hacer las mismas cosas, como hacer cuentas, conciliar los gastos o incluso a desorientarse en lugares que antes le resultaban familiares, así como dificultades en el lenguaje. Esto sucede al inicio, más adelante  requieren de ayuda para realizar  tareas menos complejas, y después en las actividades básicas de la vida diaria hasta el grado en que en una etapa avanzada de la enfermedad, su dependencia es absoluta.

Al hablar de la EA, se hace referencia a la familia, pues estos enfermos requieren del apoyo familiar, de manera progresiva, lo que hace de ésta una enfermedad  que ocasiona un gran impacto psicosocial y económico. En México se cuenta con fundaciones (Fundación Mexicana de Alzheimer), asociaciones (AMAES) y algunos centros de día (Alzheimer México).

Lugares donde el familiar puede encontrar información y apoyo para entender y poder enfrentar esta enfermedad. Esta es una buena alternativa para el cuidado profesional de las personas que la padecen. El Grupo de Investigación de demencia 10/66 forma parte de la Asociación Internacional de Alzheimer (ADI).  Se creó en el año 1998 con la finalidad de contribuir a disminuir la brecha en investigación en demencia entre países desarrollados y países en desarrollo.