* La hormona masculina genera crecimiento de las células y cuando hay cáncer también lo reproduce. •Mueren tres mil mexicanos al año por cáncer prostático y se registran otros tantos casos nuevos.
Redacción:
Uno de los tratamientos más eficaces contra el cáncer de próstata es el bloqueo del metabolismo de testosterona, también conocido como castración quirúrgica o castración química. Esta hormona provoca el crecimiento de las células que se encuentran en el órgano y, cuando hay cáncer, éste se reproduce mucho más rápido.
Aseguró lo anterior el doctor Mauricio Cantellano Orozco; especialista de la Unidad de Urología del Hospital “Manuel Gea González”, de la Secretaría de Salud, además comento:”El cáncer de próstata se presenta principalmente en hombres mayores de 40 años, y a medida que más edad tienen, son más propensos a contraerlo, por lo que se recomienda que periódicamente se realicen los estudios para detectar a tiempo cualquier enfermedad de la próstata.
El especialista sostuvo que anualmente mueren en México alrededor de tres mil hombres por cáncer de próstata, pero también cada año, se presentan alrededor de tres mil nuevos casos en los hospitales y unidades del Sector Salud, mismos que son diagnosticados con diversos análisis previos a la biopsia.
Explicó que uno de los análisis más conocidos es a través de la sangre, en donde se observan los valores del antígeno prostático, mismo que en sus niveles normales se observa en valores de 0 a 4, pero cuando éstos ya se rebasan, es necesaria la evaluación por un especialista en urología.
El Dr. Cantellano Orozco, dijo que el antígeno prostático, es una sustancia que se genera precisamente en la próstata y cuando ésta produce la sustancia en mayores cantidades, es porque puede haber tres tipos de enfermedades en la próstata:
- La primera; puede ser una infección, que sería la prostatitis.
- La segunda; es un crecimiento benigno, sin cáncer, que es la hiperplasia prostática.
- La tercera; es el crecimiento del órgano pero con células cancerígenas, mismo que es el padecimiento de mayor riesgo: el cáncer de próstata.
Aseguró que existen pacientes que llegan a presentar hasta 10 unidades en sus valores de presencia de antígeno prostático, lo que es considerado como una urgencia y requiere ser evaluado por el especialista. En esos casos, es muy probable que el paciente ya tenga cáncer en la próstata.
Por otro lado, señaló que parte del procedimiento para el diagnóstico de próstata es el tacto a través del ano, ya que es determinante para conocer la situación de una próstata, pues “cuando hay partes que se endurecen como piedra”, es porque el cáncer lo ha invadido.
Respecto al tratamiento recordó que la testosterona en el cuerpo de un hombre es producida en 90% a través de los testículos y el 10% restante se produce en las glándulas suprarrenales, que están arriba de los riñones. Cuando a una persona con cáncer de próstata avanzado se le quitan ambos testículos, que se llama orquiectomía, esto es una castración quirúrgica.
Explicó que la castración química, es a través de otro tipo de medicamentos que actúan desde la parte central del paciente. Estos medicamentos son inyectados y bloquean todos los pasos de síntesis de testosterona y se llaman análogos LH-RH, que sustituyen a la castración quirúrgica y son una alternativa para evitar que se deban extirpar los testículos al paciente.
Cuando el cáncer se encuentra aún “focalizado” en el interior de la próstata, no es recomendable la radiación, ya que existen otros tratamientos. Sin embargo, la radiación se hace necesaria cuando el cáncer ya ha invadido otros órganos como son la vejiga, músculos y hasta huesos en los alrededores de la pelvis, pues se trata de cáncer muy avanzado que debe ser tratado con radiaciones, concluyó el experto.